En la ciudad de Iquitos, Amazonía del Perú, la población en su conjunto vive densa incertidumbre, pues mientras un sector de ella piensa que se está aplicando al presidente de la Región Loreto Yván Enrique Vásquez Valera, excesiva medida coercitiva, (se encuentra hoy con prisión preventiva, aislado en el penal de Guayabamba); otro sector de la población cree que la Sala de Penal de la Corte Superior de Justicia de Loreto, debe ratificar la resolución que declaró fundado el pedido fiscal de prisión preventiva, vale decir, que Vásquez Valera debe permanecer preso, principalmente por el peligro de obstrucción de la justicia. 

La defensa de cada uno de los ocho implicados en el sonado caso de compra direccionada de cuatro motochatas por un monto superior a las 4’250,000.00 Nuevos Soles cada una, dice que se les acusa sin pruebas suficientes, sin ninguna pericia que tipifique defraudación, sin pruebas suficientes de colusión; mientras que los acusadores indican que en la etapa de investigación preliminar, ninguna de las pruebas que quiere la defensa de los imputados son necesarias, pues éstas se van a generar en la segunda etapa de la investigación preparatoria que inició hace poco.

El caso evidencia posible caso de parálisis paradigmática de los abogados de la defensa acostumbrados al paradigma anterior al nuevo Código Procesal Penal, ya que actuaban como si el proceso estaría en la etapa del juicio oral, donde en efecto las pruebas contundentes son determinantes, pero no en la etapa preliminar en la que únicamente son necesarios indicios de la comisión de un delito y de la participación de los implicados.

El caso adicional es el peligro procesal, y el hecho de las muchas denuncias del imputado Vásquez Valera, del cual la población hace mucho tiempo que ya determinó su esencia delictiva.

En su defensa Vásquez Valera mencionó que le acusan de no colaborar con la justicia porque no se acordaba de los nombres del comité de licitación y las fechas de la firma de los documentos, porque dice que el firma más de cien documentos por día y no se va a acordar de todos, pero sí hubiera respondido si me hacían llegar una lista de preguntas; sin embargo este pretexto es falso, debido a que Vásquez Valera, no declaró de improviso, sino que lo hizo después de muchas reprogramaciones y con sólo a la primera reprogramación, Vásquez Valera tenía la obligación de ver de qué se trataba la citación y así él no hubiera tenido tiempo para interesarse en ello, para eso el gobierno regional paga asesores, para que le preparen un informe completo del caso y tenga que responder; pero no, lo que Vásquez Valera eligió es obstruir la administración de justicia.

Pero este Vásquez Valera, Presidente del Gobierno Regional de Loreto, tiene además el caso de la Planta de Tratamiento de Aguas Residuales PTAR, una buena obra si no se contamina con corrupción, pero como este gobierno regional ya está corrupto, tuvieron una gran “coima” y como es natural, ya no pudieron controlar, pese a que en efecto había todas las máscaras de manera que parezca “legal”, como también para ellos parece “legal” el caso de las motochatas.

El video que presento a continuación muestra un caso contrario a corrupción, el clip es de la película Locke, pero Iván Locke no es corrupto; por ello, cuando el Procurador Anticorrupción vió las grietas en la infraestructura de la PTAR, dijo "... les guste o no les guste, esta obra es un desastre ..."

Es esta “legalidad” que tiene que desbaratar el Ministerio Público, y creo que lo va a lograr si no median nuevas “coimas” de un posible cártel de la corrupción a cualquier nivel.

Los que defienden a Vásquez Valera y sus cómplices, hablan de derechos fundamentales como la libertad. Tendrán que enseñarles a estos imputados que cuando planean delitos, por más precisos que piensen que están haciéndolo, borrando todas las huellas, están atentando ellos mismos contra ese derecho fundamental, pues siempre es natural que caigan. Por ello pienso que esta es la hora final de Vásquez Valera, como lo desea gran parte de la población de Loreto; es necesario indicar también que del sector que defiende a Vásquez Valera, sólo una ínfima parte no tiene intereses creados, pero el grueso de ellos, lo hacen por algunos mendrugos que caen de la mesa de la corrupción.